En algún momento hemos escuchado acerca de las casas pasivas, y si estamos considerando invertir en una nueva residencia nos sentiremos inclinados a estudiar este estándar.
Seguramente encontrarás abundantes elogios y consideraciones de lo positivo de su ahorro energético, o de lo confortables que son.
La pregunta que cabe hacerse es ¿no existe ninguna desventaja?, y, si hay desventajas ¿Cuáles son?
¿En estas líneas intentaremos conocer sus desventajas, si es que las tiene, y el peso que hacen al tomar la decisión de unirse a esta tendencia?
Passivhaus
El estándar de construcción passivhaus establece un tipo de edificación que se apoya en minimizar el gasto energético, mientras aprovecha las ventajas climáticas de su localización. La necesidad de energía puede verse disminuida hasta en más de 70 % con respecto de las viviendas construidas bajo un esquema tradicional.
Desventajas
Aunque podemos insistir en muchas cualidades beneficiosas en el tema ambientalista e incluso en cuanto a la salud de sus habitantes, no olvidemos que ahora intentamos encontrar alguna desventaja. Veamos.
El coste de estas construcciones está por encima del que podría causar la edificación de una casa tradicional. Esto se debe a la instalación de los sistemas de ventilación, puertas y ventanas aislantes para lograr máxima hermeticidad, e incluso a la eliminación de todo puente térmico de la vivienda.
Sin embargo, no podemos pasar por alto, que todas esas instalaciones que aumentan el costo, son las que logran disminuir la necesidad de energía adicional, y, por tanto, baja nuestra factura eléctrica y de combustible calórico en general. A mediano y largo plazo se compensarán estos costos, y allí empezaremos a sentir el ahorro.
El aislamiento que permite la eliminación de ruidos y olores molestos, puede hacernos mantener sin contacto con una brisa fresca de la mañana, o del olor a tierra mojada, que seguramente será del agrado de muchos.
Pero esta aparente desventaja, es fácilmente desmontable, puesto que aunque mantener puertas y ventanas cerradas garantiza la hermeticidad buscada por el estándar, no existe impedimento alguno para abrirlas en un determinado momento, y disfrutar de los beneficios del exterior, si así se desea.
Por último, podemos mencionar que, aunque las casas pasivas tienen como especial búsqueda el ahorro de energía a través de sus especificaciones de construcción, no pareciera perseguir la misma conciencia ambientalista en cuanto al tema del uso racional de las aguas.
En ese aspecto tendríamos que establecer algunas adaptaciones y mejorar el aporte a nuestro ambiente.
Certificación
Si una vez concluida la construcción de la vivienda pasiva, se desea obtener la certificación por el Passiv institut, esto tendrá un sobrecosto de más del 10% con respecto al costo de la edificación tradicional.
Claro está, esta certificación se tramita y obtiene a petición del propietario, y no siempre ha de otorgarse.
Como podemos entender, si buscamos encontraremos algunas desventajas en las casas pasivas, pero estas no tienen peso al ser comparadas con los múltiples beneficios que otorga.
Igualmente, se debe resaltar que las objeciones que notamos, son totalmente solucionables sin cambiar nada de la esencia del estándar.
