Concepto nada nuevo
Aunque para muchas personas los conceptos Sostenible, Ecológico o Bio son algo novedoso en realidad no es algo nuevo. Las Casas Sostenibles existieron desde los comienzos de la civilización pues nuestros antepasados buscaban la manera de mantenerse a una temperatura que les ayudara con el clima del entorno.
Un buen ejemplo lo hallamos en el siglo IX en Islandia, donde están las construcciones llamadas casas de césped, las cuales fueron realizadas con los materiales que disponían en aquel momento que fueron piedras, maderos que recolectaban en la playa que eran llevadas por el mar y por supuesto césped.
Y así muchas civilizaciones a través del tiempo, que aunque ya no existen muchas de ellas, nos dan la mejor demostración de que eran de una estructura fuerte y duradera en el tiempo y amigables con el entorno usando los recursos que ofrecía la naturaleza para su construcción.
Hoy en día tratamos el tema de la sostenibilidad debido a que nos hemos dado cuenta de lo mucho que hemos avanzado en construcciones arquitectónicas, pero el daño que estamos haciendo al ambiente consumiendo de manera desmedida de los recursos que pensamos inagotables.
Soluciones y no problemas
Una casa ecológicamente sostenible es aquella que utiliza los recursos naturales sin afectarlos. Vamos a ejemplificar, las casas que utilizan paneles solares para proveer de energía eléctrica a la estructura, estamos utilizando un recurso natural como lo es el sol y sin afectar el entorno.
Una solución ecológica que se está volviendo viral son los murales verdes o jardines verticales, son instalaciones que se realizan tanto en el interior como en el exterior de una edificación para proveer, a través de las plantas, de oxígeno y limpiar el ambiente de polución existente en el área. Además que dan vida a la estructura.
Otra forma de hacer una vivienda sostenible es aprovechar la luz del exterior a través de ventanas y espejos estratégicamente situados para que no haga falta el uso de una bombilla, disminuyendo así el gasto de la factura de la energía eléctrica.
Utilizando los recursos naturales
Para lograr una casa sostenible, por lo menos disminuir el impacto que podamos provocar al ambiente, tomando lo que la naturaleza nos provee:
- Se puede hacernos de un contenedor que recoja el agua de lluvia y utilizarla para regar las plantas, limpieza y con la elaboración de un buen sistema de filtración se podría volver potable.
- Aprovechar la orientación de la casa tanto para la luz solar como del viento, abriendo las ventanas ventilar las habitaciones y no utilizar los aires acondicionados. También con un espejo bien ubicado se logra una iluminación a los ambientes más oscuros con la reflexión del sol.
- En las estaciones donde hay más calor y luz solar, utilizar menos la secadora y aprovechar el viento y el sol para el secado de la ropa.
Una casa sostenible aporta un mínimo de impacto ambiental y mucho al entorno, sin darnos cuenta beneficiamos al planeta.